El Gobierno tendrá que sacar adelante 40 leyes en 2024 para recibir los fondos europeos
El plan de Transformacion y Resiliencia acordado con Bruselas obliga a la aprobación de 36 medidas para desbloquear el desembolso de dinero
- Aprobar 36 medidas en un año
- Más de 60 transposiciones de directivas europeas
- Optimismo en el Gobierno
- Elecciones de por medio
El Gobierno aprobó este martes el Plan Anual para 2024 donde recoge todas las iniciativas legislativas que pretende sacar adelante. Todas, sean decretos, proyectos o proposiciones de ley deberán obtener el voto favorable de la mayoría del Congreso. De las 198 medidas que recoge el plan, 36 son normas del Plan de Transición y Resiliencia, del que depende la recepción de los fondos europeos de este año. Si no se aprueban, Bruselas no ejecutará el desembolso correspondiente a 2024.
El año pasado, el Ejecutivo tramitó la mitad de todo el paquete previsto para 2023 por el adelanto electoral. El Parlamento estuvo operativo durante cinco meses; el 29 de mayo el presidente, Pedro Sánchez, adelantó los comicios al 23 de julio y las dos Cámaras quedaron disueltas hasta que se reanudó la tarea legislativa prácticamente el pasado enero. Moncloa argumenta así que solo se pusieran en marcha el 50% de todas las leyes recogidas en el Plan Anual. “Es bastante razonable”, aseveró el ministro de Justicia, Presidencia y Relación con las Cortes en la rueda de prensa posterior sl Consejo de Ministros de este martes.
Aprobar 36 medidas en un año
El Gobierno afirma que el objetivo de sacar adelante, al menos, todas las medidas acordadas con Bruselas resulta “realista”, según aseveró Bolaños en comparecencia con los medios. Sin embargo, el Ejecutivo se enfrenta a una aritmética parlamentaria perversa que complica sobremanera la tramitación y aprobación de cada iniciativa. Tanto es así que el Gobierno solo ha intentado aprobar tres decretos leyes: tres grandes paquetes que incluían decenas de medidas sobre diversos temas. Los grupos parlamentarios criticaron, precisamente, que el Gobierno mezclara distintas temáticas dentro de un mismo paquete. Una jugada que permitía al Ejecutivo no tener que separar incoativas y enfrentarse a una negociación ardua por cada una de ellas.
Pero la jugada no terminó de salir bien. De los tres ‘macrodecretos’ salieron adelante dos, a última hora: los socialistas no supieron si caían o se aprobaban hasta que consultaron el panel de votaciones y vieron que los siete diputados de Junts se ausentaron del pleno —con mismo resultado que una abstención— y permitieron que saliera adelante a pesar de haber afirmado públicamente que votarían “no” hasta el último minuto.
El tercer decreto, impulsado por la parte de Sumar del Gobierno, cayó por el “no” de Podemos y Junts, y buscaba reformar el subsidio por desempleo. Estas son las tres medidas que el Gobierno ha tratado de aprobar en el Congreso de los Diputados y la experiencia fue más que complicada.
“Será una legislatura de pocas leyes, pero más importantes y acorde a lo que pide nuestro electorado”, afirmaban fuentes gubernamentales a ECD incluso antes de la investidura de Sánchez.
El Ejecutivo aún no ha concretado si utilizará el mismo truco para sacar adelante estas 36 medidas. Fuentes gubernamentales insisten en que se trata de medidas sociales: protección del menor, derechos sociales… Una batería de medidas sin las que los fondos europeos no llegarán a España en 2024.
Más de 60 transposiciones de directivas europeas
Además, el Plan Anual también incluye la aprobación de más de 60 leyes que son transposiciones de directivas europeas: esto es, normas que se aprueban en Bruselas y que atañen a todos los estados miembro de la Unión Europea. El Gobierno, por tanto, también deberá impulsar dichas transposiciones aunque espera no tener problema alguno al tratarse de medidas dictadas desde la UE.
Optimismo en el Gobierno
A pesar de que la votaciones en la Cámara Baja se convierten en una batalla de ‘foto finish’, el Ejecutivo se muestra optimista y confiado en que los socios parlamentarios —PNV, EH Bildu, Podemos, ERC, Junts, BNG— apoyarán estas iniciativas porque atañen a “derechos sociales”, según califican desde Moncloa. Sin embargo, esta misma argumentación se empleó en el debate de los tres macrodecretos ley y tanto Podemos como Junts mantuvieron su “no” y estuvieron a un paso de tumbar los tres paquetes.
En Moncloa esperan aprobar, como mínimo, 50 medidas de todo el paquete anual presentado este martes y aprobado en Consejo de Ministros.
Elecciones de por medio
Moncloa y el PSOE son conscientes de que cualquier iniciativa parlamentaria tendrá que esperar. El semestre ya se preveía convulso con las tres elecciones fechadas —las gallegas el pasado 18 de febrero, las vascas el próximo 21 de abril y las europeas el 9 de junio—. Pero a esta retahíla de compromisos electorales se ha sumado el adelanto electoral en Cataluña anunciado por el president, Pere Aragonès, para el próximo 12 de mayo. Unos comicios que han sacudido toda la política nacional, que revelará el estado de ánimo del independentismo con Carles Puigdemont de nuevo como candidato de Junts, y que ha llevado a Sánchez a descartar aprobar unos Presupuestos para 2024 y centrarse en los de 2025. El Ejecutivo considera que cualquier negociación con PNV, Bildu, ERC o Junts —además del resto de formaciones nacionales— en mitad de una campaña electoral que se alargará hasta verano, es una odisea imposible. Más aún cuando están en juego las cuentas del Estado, la ley más importante del año.
Esta lógica se extiende también al paquete de medidas del Plan Anual. En el Ejecutivo esperan que las aguas se calmen tras el periodo estival y poder poner entonces el acelerador a todas estas iniciativas.
