Más espacio para el guardia civil que controla la entrada al parking de La Moncloa
Agentes de la Policía Nacional y de la Guardia Civil protegen el Complejo de La Moncloa, a las afueras de Madrid, donde reside Pedro Sánchez, se reúne el Consejo de Ministros y trabaja el personal de Presidencia del Gobierno.
En la entrada principal al Complejo, desde la autovía A-6, hay policías nacionales que controlan quién entra. Pocos metros más allá, los empleados que trabajan en La Moncloa pueden estacionar sus coches en un aparcamiento reservado para ellos. Pero deben superar una barrera junto a una garita que ocupa un guardia civil.
El Ministerio de Presidencia va a acometer obras en ese punto del acceso a La Moncloa. Para mejorar la “habitabilidad” del lugar que ocupan los guardias civiles, va a demoler la garita, que hasta ahora mide 2,90 m x 1,90 m por el exterior, y se construyó a finales de los años 90 con chapa metálica y cristales blindados.
En su lugar levantará una garita de mayores dimensiones, donde quepan mejor todos los sistemas de seguridad que manejan los agentes. Eso obligará a remodelar las instalaciones de control de accesos y de seguridad al aparcamiento que utilizan los trabajadores de Presidencia, “ya obsoletas”. Se renovará el asfaltado y se reinstalarán las barreras y cámaras de seguridad.
