Rompiendo moldes

Desde la elección de Benedicto XVI, ciertos medios nos lo han estado presentando como un hombre conservador, algunos han llegado a nombrarle como el "gran inquisidor". A su vez, Ratzinger, haciendo caso omiso a estas mal intencionadas interpretaciones, ha dedicado los primeros meses a una reflexión sosegada, lo cual -a la vista de su reconocida capacidad intelectual- dará sin duda frutos relevantes en el terreno doctrinal. En todo caso, la prudencia, la mesura y la solidez en los argumentos, unidos al perfil bondadoso que muestra en sus apariciones públicas, han echado por tierra en poco tiempo esa falacia interesada acerca de un Papa dogmático e intolerante. No hay duda que Colonia 2005 ha servido para romper moldes esteriotipados y tirar por tierra los argumentos de los que, con tanta dosis de ignorancia como de mala fe, pusieron en circulación.

Vídeo del día

Al menos 16 muertos en el incendio de
un centro comercial en China