Lo real se hace tránsito

En este viaje llevo conmigo mi vida e inquietudes, que no son tan distintas de las que muchos de nosotros y nosotras aspiran manifestar en lo que dure la distancia de un transitar del que no sabemos su verdadero final; una meta que se antoja algo enturbiada en el horizonte ya que la libertad para pensar y expresar lo que sentimos sigue siendo uno de los grandes desafíos de las sociedades actuales. J

“Fabrico mis sueños a la medida de mis necesidades, aunque a veces me ansió por querer más de lo que preciso; sin darme cuenta de que estoy derrochando un tiempo valioso en soñar lo que fabrico. Pero, ¿Qué sería del ser humano sin la ayuda de los sueños? La desilusión aparecería vestida de depresión y el luto de la esperanza seria eterno”. Amo el valor de mis costumbres, la rutina de mis actos demuestran la cordura de una vida a la que me acostumbré por sí misma, sin atacar los valores que envidien aptitudes inciertas de molestas situaciones y angostas excentricidades.

“Si preguntásemos y escuchásemos a los niños y niñas que pueblan nuestras ciudades y ocupan los pupitres de los centros escolares como realmente son y por lo que solamente ellos y ellas comprenden mejor que los mayores, posiblemente el lugar en el que vivimos sería más agradable y la clase política se vería obligada a tener en cuenta la gran importancia de la conciliación familiar en un país que quiere ser progresista y regenerador del colectivo social en el conjunto de la ciudadanía”.

El caos educativo producto de la divergencia de las diferentes ideologías al llegar al poder del país nos impide ganarle tiempo al pasado, postergar el avance de la igualdad de pensamiento, libertad de opinión y respeto a los que no piensan de la misma forma que los toro/as evidenciaría el atasco del conocimiento. La claridad extrema se me antoja inquietante, producto de una devaluación de los valores sobre los que se asienta la cultura de una nación, independiente en sus actos pero a la vez, integradora de culturas diferentes. Es esa cultura la que me preocupa en demasía, la que acontece en un tiempo de tecnologías avanzadas en una sociedad estancada, una dificultad que aconseja saltarse de una vez el carácter político de la cultura, algo que hace grande a una sociedad por muy desafecta de opiniones entre sus integrantes que exista.

El privilegio de sentarte en una caseta de madera abarrotada de libros por todas partes y respirando a tinta recién impresa es un olor que no se olvida. Tuve la gran oportunidad de vivir una Feria del Libro de Madrid 2014 repleta de emoción! Ese surtido de parabienes con gente más importante que yo en esos lares. Puede que en alguna otra ocasión reviva el disfrute de estampar mi humilde firma en ese mismo evento, añadiendo un pequeño granito de arena más a la literatura española. He recogido el guante que me han lanzado a mantener viva la ilusión por seguir adelante. Comprendí en su día que la educación es la llave que abre el arcón que guarda el tesoro de los valores humanos, el que puede darnos la razón mediante la concepción temprana de que el conocimiento es la nota predominante del progreso social, vertiendo en las aulas desde corta edad la sapiencia renovada de nuestros futuros guardianes de la ciencia.

Vídeo del día

Los reyes desean suerte a los olímpicos

 

Me doy cuenta de que la justicia duele; duele tanto como la injusticia que se me antoja nada justa en esta ocasión. Con total aceptación de la misma, con los respetos que se les deben a los jueces que la imparten y con la frialdad exigible para reflexionar sobre ello debo decir que la gravedad de los hechos no debería dar lugar a libertad alguna de quienes han sido imputados por ellos. La indefensión de la mujer ante este caso ha quedado demostrada, somos todos, al lado de ellas, los que tenemos que dejar bien claro que los justos tienen que aprender a serlo y para lograr hacerlo, tendrán que definir bien clara su conciencia en la visión de género. Ni soy juez ni abogado del diablo, tan solo soy un hombre que pretende hacer el bien mientras los que no lo comparten se debaten entre la impunidad y una libertad intolerable.

Todo es mejorable si la solidaridad aparece en la escena actual transformando la incoherencia en sensatez, si desde temprana edad enseñamos a nuestras pequeñas esponjas a interactuar con personas que a pesar de su discapacidad no son diferentes, estamos llevando a nuestra sociedad a engrandecer los valores del ser humano y prescindir de la dejación de responsabilidades para influir en la convivencia responsable..

“Vida: la suma de la belleza interior y la pureza de una afortunada realidad. Pasamos la vida buscando la compañía, incapaces de sortear el camino con la simple silueta de nuestra propia sombra y por el contrario una vez conseguido el propósito de caminar de la mano, nos vanagloriamos de dejarnos llevar por la vanidad y nos engañamos a nosotros mismos con pretensiones de ínfulas groseramente inexplicables.

Y es que nos sentimos atrapados en la inexpresividad de nuestros propios sentimientos, la vida es demasiado corta para buscar continuamente lo perfecto de la persona a la que queremos influenciar para viajar en las horas, días y años a los que el corazón nos permita. Empeñamos un esfuerzo inútil en creernos más que nadie, en merecer lo mejor y despreciar lo que está más dentro de lo que nuestra mente nos precisa. La belleza es el ideal preconcebido de sentirse afortunado por lograr su atención; aunque desde la humildad del conocimiento, lo perfecto de la vida es estar orgulloso de tus valores y de esa forma poder generar en la persona a la que no aprecias en un primer momento, una sinergia tal que rompe los esquemas de lo perfecto para convertirse en amuleto de lo indescriptiblemente genial

Abrazar la apariencia de lo normal para el resto de los mortales se convierte en andar el camino de la felicidad de la mano que nunca hubieses pensado que llegarías a coger. Pocas veces la inconmensurable sensación de bienestar la tenemos tan cerca que ni por asomo apreciábamos la belleza que irradiaba su sonrisa, ni la mirada suave con la que nos acariciaba sin percibirlo un segundo. Perdemos el tiempo, ese que tenemos contabilizado en nuestro marcador, con la obsesión de que lo bello Es lo verdadero, cuando realmente la belleza es más buscar en el interior de cada individuo porque es desde ahí dónde emana lo maravilloso o cruel de la persona; el resto es una fachada disponible a la mayoría, salvo esas excepciones a las que no aludo en este momento por falta de detalles”. jasc