Cuándo entra en vigor la ley de implementar el canal de denuncias en las empresas

Por qué la implementación del canal de denuncias es buena para las empresas

Cuándo entra en vigor la ley de implementar el canal de denuncias en las empresas

Durante muchos años, en todo tipo de empresas se han estado cometiendo irregularidades. Algunas de ellas no eran ni mucho menos graves, pero otras incluso llegaban a comprometer la salud de trabajadores y clientes. Con el objetivo de acabar con este tipo de situaciones surgió una ley de la que hablaremos hoy.

Antes de profundizar en ella, es importante destacar que la precedió otro acuerdo legislativo que se alcanzó en la Unión Europea hace cuatro años. Nos referimos a la Directiva conocida como 2019/1987. El parlamento de la UE determinó por aquel entonces que los negocios de 50 trabajadores o más que forman parte de dicho territorio estarían obligados a implementar un canal de denuncias para empresas. Cada país ha ido introduciendo dicha medida a su propio ritmo, pero vamos a centrarnos en lo que atañe a los españoles.

1 de diciembre: la fecha clave

En marzo de 2023 se dio un primer paso muy importante, ya que entraba en vigor la Ley 2/2023 que afectaba a las empresas que tenían un mínimo de 50 empleados. Algunas no se lo pensaron dos veces y decidieron implementar rápidamente el sistema en el que profundizaremos más adelante.

No fue el caso de muchas otras que, a fecha de hoy, todavía no cuentan con su respectivo canal de denuncias. Para este tipo de compañías, independientemente de si son PYMEs o incluso grandes empresas, el plazo está a punto de llegar a su fin.

En concreto, el canal ha de estar implementado antes del 1 de diciembre. En caso contrario, si la empresa tiene 50 trabajadores o más y no dispone de un sistema habilitado para que puedan denunciarse infracciones, no estaría operando bajo la legalidad vigente, con todo lo negativo que ello podría acarrear.

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La Unión Europea se está tomando este tema muy en serio, pudiendo decir lo mismo del Gobierno de España. Así lo demuestra el hecho de que, en caso de detectar un incumplimiento de la Ley 2/2023, la empresa en cuestión podría ser sancionada con una cuantía astronómica. En concreto, hablamos de un máximo que alcanza el millón de euros.

El canal de denuncias ha de proporcionar anonimidad a los usuarios que comuniquen una o varias infracciones

Conviene destacar que antes del surgimiento de dicha ley ya había empresas que contaban con un canal de denuncias. Sin embargo, en lo que respecta a la anonimidad, dejaban bastante que desear.

Por temor a represalias, muchos denunciantes evitaban comunicar la infracción que habían detectado, sobre todo los empleados, pero lo cierto es que algunos clientes también preferían no hacerlo.

La Unión Europea era consciente de este problema, así que planteó una posibilidad que fue vista con buenos ojos por la mayoría de dichas empresas: no sería necesario implementar un nuevo sistema, sino que bastaría con introducir los cambios oportunos con tal de garantizar la anonimidad.

Independientemente de si se trata de un nuevo sistema o de modificaciones para que las denuncias sean anónimas, el plazo termina el próximo 1 de diciembre. Será entonces cuando todos los responsables de departamentos, trabajadores en general y clientes de una empresa podrán hacer uso del canal de denuncias que proporcionará las siguientes ventajas.

Por qué la implementación del canal de denuncias es buena para las empresas

Es innegable que algunas decisiones tomadas por la Unión Europea pueden ser bastante polémicas, pero no es el caso que nos ocupa. Si bien es cierto que para las empresas supone un desembolso a realizar, incluso los negocios se mostraron completamente de acuerdo desde el principio. ¿Por qué?

En primer lugar, hay que decir que el gasto llevado a cabo acaba amortizándose con creces, sobre todo porque al denunciarse prematuramente las irregularidades, no se corre el riesgo de acabar recibiendo una sanción por no haberlas solucionado a tiempo, concretamente antes de que se produjera un accidente o una inspección de los organismos encargados de ello.

Por otra parte, el dinero que cuesta implementar un canal de denuncias también se recupera pronto gracias al aumento de la productividad por parte de los empleados. Pero, ¿cómo puede ser que esto afecte positivamente a algo que adquiere tanta relevancia? En concreto, es debido a lo a gusto que pasan a estar los trabajadores.

Sabiendo que ante cualquier infracción podrán comunicarla evitando represalias de ningún tipo, desempeñan sus labores profesionales sin miedo alguno, con una eficiencia incluso mayor que la de antes. En parte también es fruto de notar el aumento de transparencia que viene dado por la implementación del citado sistema.

Así pues, pasar a disponer de un canal de denuncias para empresas no solo es una exigencia a nivel legal, sino también algo muy beneficioso que se acaba notando a corto, medio y largo plazo. De hecho, incluso algunos de los negocios que no están obligados a implementarlo -los de menos de 50 trabajadores- no dudan en dar el paso de contratar a profesionales que habiliten un sistema para comunicar irregularidades anónimamente.