Rinoplastia sin cicatrices: la técnica más avanzada del mercado

¿Qué diferencia hay entre una rinoplastia normal y una ultrasónica?

Rinoplastia sin cicatrices: la técnica más avanzada del mercado

El sector de la medicina estética está avanzando a pasos agigantados, con la adopción de técnicas que cada día dejan menos marcas. Una de estas nuevas técnicas avanzadas es la rinoplastia sin cicatrices.

A lo largo de este artículo te contaremos en qué consiste este tipo de intervenciónen la que, a pesar de haber agujas e incisiones, no quedan marcas en la nariz.

¿Qué es la rinoplastia sin cicatrices?

Conocida también como rinoplastia cerrada, este tipo de intervención quirúrgica se caracteriza por su modo de proceder, diferente al de la rinoplastia abierta. Utilizada durante décadas para remodelar y corregir el tamaño, forma o simetría de la nariz, el profesional accede a sus estructuras internas desde dentro.

Con la ayuda de un bisturí piezoeléctrico, se llevan a cabo pequeñas incisiones en la parte interna de la nariz. La rinoplastia ultrasónica, técnica en la que son pioneros en Rebel Noses, no deja ningún tipo de cicatriz externa y disminuye el edema y la aparición de hematomas tras la operación.

¿Qué diferencia hay entre una rinoplastia normal y una ultrasónica?

Si quieres hacerte una rinoplastia málaga, debes saber que en la clínica de medicina estética Rebel Noses cuentan con la Rinoplastia Método Rebel, una técnica que deja a un lado las antiestéticas cicatrices tras este tipo de intervención. 

Vídeo del día

Impresionante aurora boreal sobre Portland (Maine)

 

La rinoplastia ultrasónica se diferencia de la normal o tradicional en la forma en la que se trabaja sobre la estructura de la nariz, ya que se hace de forma interna. De hecho, se puede decir que ambas técnicas son prácticamente iguales, con los siguientes puntos como únicas diferencias.

Las herramientas empleadas

En ambos tipos de rinoplastia hay que fracturar el hueso para cambiar la forma de la nariz. Lo único diferente es la herramienta que se utiliza y la forma de limar el dorso y de llevar a cabo a osteotomía. 

En el caso de una rinoplastia abierta se emplea un osteotomo, el cual puede resultar impreciso a la hora de fracturar el hueso de la nariz. El bisturí piezoeléctrico que se utiliza en las rinoplastias cerradas, sin embargo, ayuda a cortar el hueso con un mayor control, eliminando casi por completo la posibilidad de que se produzcan fracturas inesperadas en el mismo.

La precisión de la intervención

Aunque ambas técnicas ofrecen resultados excepcionales, lo cierto es que la rinoplastia cerrada requiere de una mayor disección en la zona, lo que se traduce en incisiones más extensas que en las rinoplastias tradicionales.

Cambia también el limado del dorso, que se realiza de forma mecánica con el piezoeléctrico y de forma manual con el periostótomo.

El periodo de recuperación

La rinoplastia cerrada o sin cicatrices reduce al máximo el tiempo de recuperación. Lo más común es que la intervención no deje edemas, moretones o la zona inflamada.

Por supuesto, tampoco deja cicatrices visibles, lo que hace que este tipo de operación sea totalmente innovadora en la actualidad. Los resultados tras los 90 minutos en quirófano serán para toda la vida, con las mínimas molestias y con un magnífico resultado