Culminando la infamia

El presidente del gobierno, Pedro Sánchez, durante la entrega de premios en el Comité Olímpico Español (COE), en Madrid. 21/12/2022
El presidente del gobierno, Pedro Sánchez, durante la entrega de premios en el Comité Olímpico Español (COE), en Madrid. 21/12/2022

Último ensayo del año que termina y que admitido no soy lo que se podría entender por erudito, menos aún experto (no es lo mismo), afirmo estoy asistiendo a una tragedia definida por "sucesos" y sus protagonistas, ejemplares estos de una subespecie de monstruitos creados por el "sistema" para hacernos asentir a los ciudadanos de cuánto se propone. 

Nos referimos los "simples mortales" a un tipo de empresas mal llamadas de comunicación, también tecnológicas que, juntamente a los individuos que las encabezan, dioses menores de olimpos artificiales o montajes cuya "opulencia aparente" tan siquiera puede medirse con el dinero más o menos tangibles de otros tiempos.

Y es que a poco que escarbemos en nuestra espero todavía capacidad de raciocinio, entenderemos que, en el fondo, nada ha cambiado salvo los medios técnicos de "cretinización" empleados para guiarnos por la senda marcada por el poder, cualquiera sea la forma en que se manifiesta y que sigue representado con la palabra mágica de "fe" en ellos y en sus acciones. 

Es mi personal opinión que quien tenga curiosidad por la historia, "relato del testigo" me aclara y define el profesor y ex catedrático de Historia Antigua Genaro Chic, eche una mirada a los hechos, que no tanto a los personajes protagonistas para llegar a entender, es mí caso, que realmente no son quienes realmente la crearon. Tengo para mí que el proceso es inverso, de manera que fueron los acontecimientos los que hicieron necesaria la creación de personajes que le dieran una naturaleza corpórea, también divina incluso mística de ser necesario, de ahí que se perpetuaran en nuestra memoria como creadores de acontecimientos de los realmente sólo fueron actores, aunque principales como a modo de ejemplo fueron para bien o para mal Calígula, Napoleón, Mao... etc. 

La pregunta a hacerse es a donde conducen cuantos cambios estamos experimentando, más si somos conscientes de la trascendencia que en nuestras vidas y las de nuestros hijos tuvieron y siguen teniendo personajes en tiempos donde, por momentos parece que todo está cambiando vertiginosamente y en otros donde nuestra percepción es la contraria y que nada cambia.

Todo sistema es seguro requiere para subsistir estar en estado de crisis o cambio permanente, lo que en casos requiere estar representado por sujetos de cuánto menos "visible vanidad o ego" entre otras "cualidades" que, solo podrían ser contenidas y en casos disimuladas por el muro de una inteligencia y cultura superiores de la que también en muchos casos visiblemente carecen.

Es por ello que contemplar a la caterva de sujetos "elegidos", como así lo creen, por un pueblo que confunde democracia con partitocracia, mueve a la tristeza y conmiseración de lo que se entiende es nuestra pretendida condición de ciudadanos.

Solo a modo de ejemplo tomemos un presidente del Consejo de ministros, caudillo en esta ocasión guaperas que, ser tratado de "presidente" acelera su pulsión narcisa hasta límites patológicos, siendo un pobre diablo al nivel del país que dice gobernar permanentemente embutido en su archiconocida condición ser refractario a la verdad que miente, miente y miente con enorme frialdad y a sabiendas, siendo realmente un vulgar copión de su tesis doctoral y un muñidor de indignidades sin fin y sin límites éticos y morales. 

De comportamiento y lenguaje corporal sinusoidal, aclaro "gustándose" que dirían los taurinos y que acompaña de sonrisas chulescas al "tendido" en que ha devenido el Parlamento e individuo que para pasmo de una persona normal, eligió como vice de su desgobierno a un sujeto del que afirmaba meses antes le produciría insomnio y cuya catadura y miseria moral se mostró entre otras e innumerables, al comentar emocionarse viendo apalear a un Policía gubernativo.

 

He de reconocer creí colmada mí capacidad de asco y asombro cuando consideró como socios preferentes a herederos de terroristas que "asesinaron" a sus compañeros de partido y a otros que insultan a la persona que encarna la máxima representación del Estado en casos conocidos de comportamiento "rufianesco" y no conscientes del desprecio que por su falta de "pedigrí" sienten por él sus compis de banda que le utilizan a modo de valiente mamporrero, siendo un pobre macarra que, amparado por el burladero del Parlamento, trata también a Jueces y Magistrados de "golpistas sin tricornio"

Pero no fue la consideración de los herederos políticos de Eta y de otras subespecies comentadas la culminación de mi asombro. La lista de indignidades se cuentan por mentiras y la relación interminable de "todos" sus actos de gobierno culminados "hasta el momento" con el indulto a unos golpistas tratados con enorme benevolencia por los jueces del Tribunal Supremo que les condenó por delitos de "sedición" y en algunos casos de malversación y a los que en "golpe" Institucional indultó en un primer tiempo de la farsa y en un segundo con anulación del delito de sedición y reforma, con rebaja de las penas a los delitos de malversación.

En "mi opinión" se trata de un individuo capaz de hacer astillas de un país con el único fin que sus llamas iluminen su trascendente figura. Pero no nos confundamos, la responsabilidad que tenga en sus manos la gobernanza del país es fundamentalmente nuestra por haber permitido se llegara a esta situación sin revelarnos contra él y la tropa que capitanea sacándole de su circo.

Me pregunto por último porqué acciones en el pasado como eran pactar con enemigos cuyo objetivo es la disolución de España, hoy con el añadido hacerlo con descendientes de quienes asesinaron a nuestros compatriotas no siguen considerándose delitos flagrantes de alta traición sin percatarse que los mansos, cuando se rebelan, son capaces de cometer atrocidades que le pillarán de lleno. 

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