Tráfico saca a las carreteras las ‘motos camufladas’ en plena operación salida

A lo largo del mes de junio, el número de víctimas en accidentes de carretera ha sido de 108 personas, 16 más que 2023 durante ese periodo. Y ahora el país se encuentra en plena operación salida, con motivo de las vacaciones de verano.

Además, la movilidad en junio respecto al año anterior aumentó un 5,1 por ciento, con un registro de 39,8 millones de desplazamientos de larga distancia.

Víctimas mortales

En lo que llevamos de año se han producido en las carreteras españolas 540 fallecimientos, 37 más que en el periodo anterior.

Además, se da la circunstancia de que el número de víctimas mortales por uso de motocicletas también ha ido aumentando: 33 fallecidos en el mes de junio, 12 más que en junio de 2022.

El día con más víctimas mortales fue 30 de junio, domingo, con 11 fallecidos en las carreteras.

Fines de semana

A la vista del incremento de accidentes, pero sobre todo de la época veraniega, en plena operación salida de mitad de julio, la Dirección General de Tráfico ha tomado la decisión de reforzar la vigilancia en las carreteras recurriendo para ellos a ‘motos camufladas’.

En abril pasado, Tráfico ya anunció la puesta en marcha de esos vehículos, aunque entonces solo en algunas comunidades autónomas y en fin se semana, sábado y domingo.

Entraron en servicio en seis comunidades: Andalucía, Baleares, Canarias, Castilla y León, Comunidad Valenciana y Galicia, con dos motos por zona, es decir, en total doce unidades.

Sin embargo, un portavoz la DGT ha confirmado a Confidencial Digital que se van a ir poniendo en servicio más motocicletas “a lo largo del verano” y en otras zonas del país.

Motoristas de paisano

Las ‘motos camufladas’ son vehículos comerciales normales, no llevan ningún distintivo que pueda identificarlas como unidad oficial. Y son conducidas por agentes de paisano, no con uniforme de la Guardia Civil, por lo que pasan inadvertidas para los usuarios de las carreteras.

Según explica el portavoz de la DGT, se trata de motos que “no multan”. No pondrán las sanciones, sino que lo que hacen es “dar aviso a las patrullas que se encuentren más adelante” en la carretera para que detengan a los conductores y puedan ser multados.

Actualmente las motos se encuentran en las carreteras del país a título de prueba. Se está comprobando que su uso es efectivo y eficiente en el control del tráfico.

Guardias civiles

Aunque van de paisano, las ‘motos camufladas, son pilotados por miembros de la Agrupación de Tráfico de la Guardia, al igual que las motos ‘oficiales’.

En este caso, no necesitan ningún tipo de formación añadida, para poder utilizarlas.

La forma en que identifican a los conductores, según el portavoz de la DGT, es por el “número de matrícula” de los vehículos.

Si los agentes que van en esas motos detectan alguna “conducta irregular" (conducción temeraria, infracciones de tráfico…) por parte de los conductores dan aviso a la patrulla más cercana junto con el número de matrícula. Y los infractores no sabrán por qué les paran, ya que no habrán identificado ningún vehículo ‘sospechoso’.