España y Europa

Llama la atención el afán que tienen todos los miembros del Partido Socialista de acusar al Partido Popular. Hasta ahí todo sería normal y lógico si no fuera porque las acusaciones suelen venir casi siempre trufadas de aquello de ‘arrimar el hombro’ y de intentar desgastar al gobierno de Rodríguez Zapatero.

Esa era una de las especialidades de José Blanco antes de su elevación a los altares del AVE, compartiendo peana con Esperanza Aguirre. En estos días el relevo lo ha cogido Leire Pajín de una forma más o menos estable. Pero siempre hay espontáneos que –de manera coyuntural, que diría el mismo Blanco- también se creen en la obligación de acusar a la oposición precisamente por hacer oposición.

Le ha tocado el turno a Ramón Jaúregui. El político vasco desterrado por Rodríguez Zapatero a Bruselas -aún no se sabe muy bien por qué- ha dado en la manía de sus correligionarios y afirma estar preocupado porque el Partido Popular aprovecha las elecciones europeas para desgastar al gobierno socialista, y eso para él es una maldad porque ‘confundir Europa con España es engañar a los ciudadanos’.

Ahí queda eso. Confundir Europa con España no es engañar a nadie, es simplemente una muestra de incultura, de no saber geografía, de ignorar la historia y de querer embarullar.

Pero si lo que quiere decir Ramón Jaúregui es que le parece mal que el partido de la oposición que, por lógica política, aspira a gobernar, aproveche unos comicios para Europa pero en los que participan los españoles y en los que se enfrentan entre otros PSOE y PP, aproveche el momento para dar pasos para tratar de conseguir el gobierno de la nación, es que no tiene la menor idea de la vida política y de cómo se desenvuelve. Y como de Ramón Jaúregui no se puede decir que desconozca la vida política, ni el transcurrir parlamentario, ni la forma de hacer y de estar en la oposición, lo que hay que pensar es que el que engaña a los ciudadanos con afirmaciones como la que nos ocupa es él.