Por la boca…Blanco y cierra Madrid

Hay gallegos a los que las tradiciones les atan mucho. Y no digamos nada las leyendas. Y aunque la leyenda de ‘Santiago y cierra España’, no se sitúa en Palas de Rei sino en Clavijo, José Blanco ha hecho una adaptación libre y quiere cerrar Madrid.

Como es gallego no se sabe si la clausura es de cerrar -o sea, de echar el cierre-, de cerrar contra Madrid, en el sentido bélico de la palabra, o es simplemente un ‘flatus vocis’ provocado por los gases que a todos los políticos les producen los fines de semana mitineros.

El caso es que el ‘demóstenes’ de Palas de Rei ha dado en la idea de que para ahorrar hay que cerrar Madrid. Claro que si a Miguel Sebastián le da por investigar en los planteamientos oníricos de Hamilton, por qué al ministro de Fomento no le va a dar por cerrar la capital ahora que Esperanza Aguirre ha dejado el despacho por un par de semanas. Pero dado que la presidenta ya se ha reincorporado a su trabajo es evidente que a Blanco se le ha pasado el arroz del cierre.

Nos ha descubierto Blanco que Mariano Rajoy no ama a España, que sólo quiere desbancar al PSOE porque odia a Rodríguez Zapatero y que, además, es un cobarde porque no se ha atrevido con Camps. Como razonamiento político es pobre, como frase mala y como insulto escasito en comparación con las cosas a las que Blanco nos tiene acostumbrados.

Mucho le ha dado de sí el fin de semana al ministro de Fomento. Se conoce que tiene mítines ‘sobrevenidos’, que no solamente va a ser la nieve la sobrevenida en plena carretera de La Coruña. Con el PSOE todo cambia y la nevada entre Villalba y Las Rozas en la provincia de Madrid, que tuvo casi seis horas parados a miles de madrileños, para el señor Blanco no es ni un fenómeno de la naturaleza, ni una imprevisión de los encargados de que no haya imprevisiones, ni siquiera un caso de mala suerte.

Fue pura y simplemente algo sobrevenido. O sea, como el propio Blanco que salió un buen día de Palas de Rei y nos ha sobrevenido a los españoles.

Igual es que se tarda tiempo en adaptarse a las lentillas después de estar con gafas desde pequeñito. Vamos, desde antes de sobrevenirnos a los españoles.