Por la boca… Oportuno y conveniente

‘Se hará lo que sea oportuno y conveniente’; ‘se tomarán las decisiones más oportunas y convenientes’; ‘era lo más oportuno y conveniente’… Lo de oportuno y conveniente es una de las muletillas preferidas por Mariano Rajoy en ese afán suyo de crear un personaje que no diga nada, que no aclare nada y que apenas se comprometa en nada.

Es el Mariano Rajoy que, en sus recientes declaraciones a Radio Nacional, nos ha dejado claro que no cree que se debe pitar el himno de España, entre otras razones porque en ningún país se hace y que, cuando es preguntado que si, de pitarse el himno, es partidario de suspender la final, afirma que no hay que adelantar acontecimientos. Todo un programa y toda una respuesta firme.

Este es el problema de Mariano Rajoy que, a base de no comprometerse con nada ni con nadie, de querer contentar a todos y de pretender no molestar a nadie, molesta a muchos y no contenta a casi nadie.

Dedicado a hacer y decir lo ‘oportuno y conveniente’, se ha encontrado de manos a boca con una derrota en Andalucía, con no muy buenos augurios en las próximas citas electorales y con muy pocas posibilidades de pactar para gobernar en minoría; todo ello aderezado con más de un verso suelto en su partido.

Habría que averiguar qué es lo que –economía aparte- entiende Mariano Rajoy por conveniente, supuesto que su sentido de la oportunidad, no parece demasiado desarrollado. Pero sobre todo, a la vista está, hay que pensar que lo conveniente no es lo que más conviene a muchos españoles y en muchas cosas.

Los millones de votantes que dieron la mayoría absoluta al Partido Popular, son los primeros que van a sufrir, si nadie lo remedia, las consecuencias de lo oportuno y de lo conveniente.

Es muy posible que Mariano Rajoy no salga muy bien parado en este año electoral y que el Partido Popular pierda poder a chorros, pero que nadie olvide que los españoles que votaron a los populares, porque querían ver reflejado en su vida diaria un programa concreto, van a ser los primeros perjudicados.