La libertad de prensa en Venezuela
Aunque no se sepa bien si lo que ocurre con la libertad de prensa en Venezuela, es a causa de los consejos e informes de Juan Carlos Monedero y demás compañeros de Podemos, o si lo que pretende imponer Podemos en España es lo que ocurre en Venezuela con los medios de comunicación, bueno es que se sepa el ahora y aquí de los periodistas venezolanos.
Ha estado en España, concretamente en la Universidad Complutense, un grupo de destacados profesionales de la información, que sufren en sus medios el concepto que de la libertad de prensa tienen los chavistas con Maduro a la cabeza. Quieren que aquí, conozcamos la realidad que están viviendo en el ejercicio de su profesión, y la hipotética situación en la que se verían los medios españoles si Podemos estuviera en condiciones de imponer sus postulados en la materia.
Explican, estos periodistas, que no tienen acceso directo a las sesiones parlamentarias y que se tienen que conformar con seguirlas por televisión y que su contacto con los parlamentarios es prácticamente inexistente. El control de las empresas por parte del gobierno es casi total, con 15 periódicos y 400 emisoras de radio y televisión. Además, el cambio de titularidad, debido a sucesivas compras, es imposible de averiguar y no sabe quienes son los verdaderos dueños y responsables últimos. Por ejemplo nadie sabe quién o quienes han comprado un medio tan importante en Venezuela, como Globovisión. El gobierno de Maduro controla férreamente el mercado del papel-prensa, con lo que la marcha de los medios impresos está absolutamente mediatizada. Todos los medios tienen la obligación de difundir los comunicados oficiales y los mensajes del gobierno.
Por si fuera poco, las amenazas –muchas veces hechas realidad- y las coacciones a periodistas, son moneda de uso corriente.
Un panorama desolador en la Venezuela de Maduro, que hace que el país esté situado a la cola de las listas relacionadas con la libertad de expresión. Concretamente se ubica en el puesto 137 de 180 países y el penúltimo entre 35 estados americanos, solamente por encima de Cuba.
