La Agencia Tributaria concedió un ‘bonus’ de 5.000 euros a 1.500 inspectores de Hacienda cuando sabía que Zapatero iba a congelar sueldos por “austeridad pública”
La AEAT adelantó la productividad al 50% de sus trabajadores para evitar la congelación del gasto público que anunció zapatero en el Congreso días más tarde. Los beneficiados por esta medida de la Agencia Tributaria, los 1.500 inspectores de Hacienda que se embolsaron cerca de 5.000 euros cada uno.
La Agencia Tributaria adelantó el complemento de productividad a la mitad de sus funcionarios para ‘burlar’ el segundo recorte presupuestario equivalente a 1.500 millones de euros que el presidente del Gobierno anunció personalmente en el Congreso de los Diputados.
El adelanto se materializó en dos pagos, que se ingresaron en marzo y abril, concretan a El Confidencial Digital fuentes del Ministerio de Economía y Hacienda. Desde el colectivo de Técnicos de Hacienda (Gestha) apuntan que los únicos que se han beneficiado de esta maniobra son los cerca de 1.500 inspectores de Hacienda que tiene en plantilla Elena Salgado.
Para poder pagar este ‘bonus’ y sortear las exigencias de la "austeridad en el gasto público" promulgadas por Zapatero, los responsables del Fisco hicieron llegar una "novedosa Instrucción" a la Junta de Personal de la AEAT, en la que explicaban el pago de la productividad "sucintamente" y lo justificaban amparándose en un informe "realizado ‘ad hoc’ para esta ocasión", resumen a ECD funcionarios de la Agencia Tributaria, conocedores de esta situación.
Dicho informe no entraba en detalles sobre el reparto, la cuantía o los beneficiarios del complemento de productividad, explicando que, al tratarse de información elaborada a partir de datos personales, revelarlos sería incumplir la Ley de Protección de Datos.
Las críticas del resto de trabajadores del organismo dependiente de la cartera que dirige Salgado no se hicieron esperar y, un par de meses después, los responsables de la Agencia "tuvieron que dar marcha atrás y retirar ese informe", recuerdan a este confidencial fuentes conocedoras del contenido del mismo.
El motivo, la postura de la Agencia de Protección de Datos, que hizo hincapié en que, en estas situaciones que ya están reguladas por una ley concreta, no se requieren medidas adicionales para proteger la información personal.
No obstante, "siguen sin conocerse los detalles de la decisión sobre la productividad, así como los datos que no se quisieron hacer públicos en su día", subrayan desde Gestha. El relevo en la Dirección de Relaciones Laborales de Hacienda también ha ralentizado el proceso, que queda pendiente hasta septiembre.
