La decisión de WhatsApp responde a la creciente preocupación por la suplantación de identidad, el acoso cibernético y la difusión no consentida de imágenes personales
Los precios irrisorios de sus productos, la escalada de los costes de producción y la posición dominante de la gran distribución en la cadena alimentaria han creado una situación insostenible que amenaza su supervivencia