Gracias Rosa

Algunos pensaban que no se atreverían a tocarla en la actualidad y que esperarían a momentos más oportunos, por ejemplo, cuando llegase la hora de elaborar la candidatura al Parlamento Europeo. Pero no, no ha sido así. Han aprovechado su ausencia por enfermedad para darla de baja en la comisión de Asuntos relacionados con las Libertades Públicas, Justicia y Seguridad y se lo han comunicado a través de una escueta carta depositada en su casillero de la Cámara de Estrasburgo.   ¿Se merecía este trato Rosa Díez? ¿Qué ha hecho la eurodiputada socialista para ser represaliada de esta manera? Como muy bien ha explicado la propia “afectada”, ella no se ha movido ni un ápice de lo que siempre ha defendido en la lucha antiterrorista, lo que es una manera muy elegante de decir que habrán sido otros, los socialistas que sí se han movido.   Cómo esta tropelía cometida con Rosa Díez no tiene explicación –salvo el reconocer que se ha hecho para apartar al discrepante- los “necios burócratas” que anidan en los partidos, también en el PSOE, han dicho que la medida se ha tomado porque al fin y al cabo, la eurodiputada socialista coincidía mucho más con el PP que con los propios socialistas.   Rosa Diez con quien coincide es con el sentido común, con la decencia y con la dignidad que han caracterizado a tantos socialistas vascos que durante tantos años de lucha por defender la libertad en Euskadi.   Si con alguien coincide Rosa Diez es con esa inmensa mayoría de españoles que no está dispuesta a que se pague un precio político por la paz; que no quiere que el Gobierno de España doble la rodilla ante una banda terrorista, porque entre otros motivos, no ha merecido la pena tanta sangre inocente derramada, para que ahora los asesinos se salgan con la suya.   Rosa Diez coincide al cien por cien con las víctimas del terrorismo que arropados por cientos de miles de españoles han pedido a Zapatero, de forma pública, en la calle, tres veces en los últimos catorce meses, que no negocie con ETA. Coincide con esas mismas víctimas que sólo piden memoria, dignidad y justicia.   Rosa Diez coincide con tantos españoles que desearíamos que el Presidente del Gobierno reconsiderara lo que está haciendo y volviera a recomponer la unidad del Pacto Antiterrorista con el PP que tanto daño ha hecho a ETA.   Es con todo eso con lo que coincide Rosa Díez y por defenderlo y decirlo públicamente ha sido castigada por la dirección de su partido. Pero Rosa puede dormir tranquila, porque ha puesto por delante su dignidad y su coherencia. Y eso en política no es lo habitual. Además, la eurodiputada socialista sabe que no está sola. Que aunque su partido haya actuado de forma tan vergonzante, cuenta con el apoyo, el afecto y el reconocimiento de muchísimos españoles que siempre hemos admirado en ella su valentía, su coraje, su arrojo para defender la paz, la libertad y la democracia en esa parte tan querida de España que es el País Vasco.