En Madrid, con ETA vivíamos mejor
Estas palabras las acaba de pronunciar Jesús Eguiguren, el presidente de los socialistas vascos que parece empeñado en pasar a la historia por las bravas, con un par. Tiene un historial de campeonato pero como ahora nadie le hace mucho caso, fundamentalmente en su partido, dispara con todo.
Es un ‘verso suelto’ dentro del PSOE pero ha tenido galones suficientes como para protagonizar varias negociaciones de alto nivel Gobierno-ETA. Aquel grupo lo integraron –como representantes del Ejecutivo Zapatero- Francisco Egea García, José Antonio Pastor y el propio Eguiguren. Se sentaron con tres representantes de la izquierda abertzale: Arnaldo Otegi, Rafael Díaz Usubiaga y Pernando Barrena.
Eguiguren lleva años intentando vender su decisivo papel en el alto fuego de ETA. Ha publicado libros, ha dado conferencias, ofrece titulares a quien se los quiera comprar y hasta intentó impulsar un documental para la televisión con su historia.
Ahora se ha dejado ver en las páginas del diario Gara. Publicará en unos días un nuevo ensayo –editado precisamente por el periódico de la izquierda abertzale- titulado ‘Euskal Herria. Por un nuevo nacionalismo, vasquismo y navarrismo’.
En este texto, el dirigente socialista defiende la creación de “una nación, un ente llamado Euskal Herria”. También ha asegurado que “Euskal Herria es prácticamente Navarra”. “Sin ella, Euskadi no tiene sentido”.
El chico, a lo suyo. Pero alguien debería decirle que con los muertos no se juega.
En Ferraz no son tontos y las palabras de Eguiguren han vuelto a caer como un jarro de agua fría en la sede nacional del PSOE. No les hace ningún favor. Al PSE ha vuelto a llegar el mensaje de que deben controlar mejor a Eguiguren, evitar estas salidas de tono...
Como si eso fuera fácil de lograr.
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