Si el CGPJ no gobierna su propia casa…

El Consejo General del Poder Judicial es el máximo órgano de gobierno de los jueces. Por sus manos pasa la ordenación, el control y la regulación de la actividad judicial en toda España. Incluyendo los altos nombramientos.

No es pequeña competencia. Y con enormes consecuencias a todos los niveles, pero sobre todo para los justiciables, o sea, la generalidad de los españoles.

Así que, importa mucho que el CGPJ lo haga lo mejor posible.

Por eso, el escándalo a propósito de la acusación de un vocal, Gómez Benítez, al presidente del Consejo, Carlos Dívar, al que ha denunciado ante la Fiscalía del Estado por malversación, arroja enormes dudas sobre las capacidades del propio CGPJ.

Un asunto de ese estilo tendría que haberse abordado en el seno del propio organismo, por el sistema de pedir explicaciones y, en su caso, reprobar al presidente, si hubiera motivo; o, si no, descalificar al vocal que tomó la iniciativa. Y ya está.

Suficientemente dañado se encuentra el crédito de la justicia en este país, como para provocar espectáculos lamentables como una denuncia por malversación contra el presidente del Consejo del Poder Judicial.

Lo que está ocurriendo va dejando al CGPJ un poco más bajo aún en la consideración de la sociedad.

Porque, si el Consejo no es capaz de gobernarse a sí mismo, su propia casa, ¿cómo van a gobernar a los jueces? Terrible.

 
Comentarios