Transformación global: factura electrónica en el mundo
Descubre cómo la factura electrónica ha transformado la forma de hacer negocios en todo el mundo y los desafíos de su implementación
Una factura electrónica es un documento digital con valor fiscal, la cual se emite en formato electrónico. Este documento se originó en legislaciones latinoamericanas en los años 2000 a 2005 y que hoy en día es utilizada en muchos países en el mundo.
La factura digital es un documento legal el cual válida una operación comercial entre dos partes, quien vende un producto/servicio y quien lo compra y que contiene datos como:
- Información fiscal de cada parte involucrada
- Datos de los productos/servicios adquiridos
- Desglose de impuestos con base a la legislación de cada país
- Entre otros datos de validación
El formato de una factura varía según la legislación fiscal de cada país, ya que cada uno tiene reglas y elementos diferentes para cumplir e incluir, lo que no cambia es que su principal función es llevar una contabilidad correcta y cumplir con las obligaciones tributarias correspondientes.
Países que facturan electrónicamente
En la actualidad la mayoría de los países facturan electrónicamente, pero en algunos aún no es obligatorio, aquí te muestro algunos de estos y detalles sobre su sistema de facturación:
Asia
Japón
En este país aún no es obligatorio el uso de formatos electrónicos, pero a partir del 1 de octubre de este año, Japón comenzará a exigir el uso de facturas cualificadas (Qualified Invoice Base Method), que podrán intercambiarse electrónicamente utilizando la Red Peppol.
La Agencia Digital Japonesa ha recomendado usar el formato mencionado para que una empresa pueda enviar una factura cualificada, para esto es necesario estar registrado ante la Autoridad Fiscal y obtener el código JCT (14 dígitos), aunque no es fundamental el uso de una firma electrónica para la emisión.
China
En China las facturas o fapiao son recibos con legalidad que se emiten en papel por medio de STA (State Taxation Administration), que sirve como una constancia o prueba de que se realizó la compra de bienes y servicios en China.
Las empresas deben adquirirlos en la STA, antes de comenzar sus ventas, lo que significa que tienen que pagar impuestos antes de realizar las transacciones por ventas.
Hay diferentes tipos de facturas en este país, así que las empresas deben hacer una estimación aproximada de su facturación de acuerdo al sector al que pertenecen para saber qué tipo de fapiao deben comprar: general, general con IVA o con IVA espacial.
Norteamérica
Canadá
Canadá no cuenta con ningún tipo de legislación en cuanto a facturación electrónica, aunque en estos últimos años el gobierno ha comenzado a fomentar su uso entre las empresas.
Por lo que la factura electrónica se puede realizar más no es obligatoria, aunque desde el año 2018 es obligatorio que los proveedores de organismos públicos deben aceptarlas.
El formato nacional principalmente usado en este tipo de documento es el UBL y las facturas digitales hechas por los contribuyentes se deben almacenar por 6 años, garantizando su integridad y autenticidad.
Estados Unidos
A pesar de ser un país de primer mundo, no cuenta con un sistema electrónico de facturación, ya que su sistema de tributación está descentralizado, es decir, sin una autoridad correspondiente que lo dirija.
Actualmente, el gobierno estadounidense y la organización Business Payments Coalition (BPC) comenzaron una iniciativa para la estandarización de la factura electrónica, la cual se encuentra en proceso de prueba.
El objetivo es diseñar un modelo de facturación digital y crear una red de intercambio de estos archivos y que todas las empresas estadounidenses, tanto grandes como pequeñas, usen la e-factura.
Europa
Inglaterra
Este país sigue algunos de los principios establecidos por normas europeas, aunque las empresas no están obligadas a facturar, es voluntario y solo las que se dedican al sector sanitario público están obligadas.
Los que se encuentran en el sector salud deben cumplir con dos requisitos:
- Contar con PEPPOL Access Point para operar en la red PEPPOL
- Contar con códigos GLN y GTIN para los productos/servicios, para intercambiarlos a través de GDSN.
Aquellas organizaciones que emitan facturas deben demostrar su autenticidad por medio de auditorías, firma electrónica avanzada o por electrónico de datos (EDI).
España
En España es obligatorio facturar de manera electrónica para los proveedores de la Administración y aquellos con operaciones de sociedades con el sector público que no superen los 5000 euros y enviarlas al Punto General de Entrada de Facturas Electrónicas que les corresponde.
Las facturas hechas deben contar con certificado electrónico para poder firmar aquellas que se dirigen a administración pública, si no son para esto entonces no es obligatorio contar con firma electrónica.
Desde 2018, también son obligatorias para las relaciones entre subcontratistas y contratistas de la Administración Pública.
América Latina
Brasil
Brasil, junto con México, son los más grandes emisores de e-facturas en Latinoamérica, así como también es potencia mundial en emisión de estos por medio de los distintos modelos de factura electrónica que tiene.
Estos modelos implican a distintas administraciones tributarias, lo que ha hecho que cuenten con uno de los sistemas de facturación digital más consolidados del mundo.
La emisión de estos documentos es obligatoria para el 100 % de los contribuyentes y es necesario obtener un certificado para firmarlos el cual proporciona la Autoridad de Certificación acreditada por el ICP-Brasil.
Argentina
La factura electrónica en Argentina tuvo inicio en el 2009, pero comenzó a consolidarse hasta el 2015 con la Resolución General 3749.
Actualmente, es obligatoria para todos los sectores de empresas, aunque estos cuentan con la opción de emitir facturas electrónicas sin controladores fiscales.
Argentina no solicita obligatoriamente contar con firma electrónica, pero el usuario debe autenticarse en el Webservices por medio de un certificado digital.
Facturación electrónica en México
El Servicio de Administración Tributaria (SAT) desarrolló el primer sistema de comprobantes fiscales digitales en el país hace unos diez años, lo cual lo volvió el segundo modelo de e-factura dentro de Latinoamérica.
Desde el 1 de enero de 2014 se declaró que la factura electrónica era obligatoria para todos los contribuyentes, sin importar el monto de sus ingresos o tipo de actividad.
Hoy en día las facturas impresas ni los Comprobantes Fiscales Digitales (CFD) son válidos ante el SAT, solo los Comprobantes Fiscales Digitales por Internet (CFDI) que se encuentran bajo los estándares del SAT en el Anexo 20 de la Resolución de Miscelánea Fiscal.
Es crucial que los emisores de facturas por internet cuenten con firma electrónica (e.firma) y, si es el caso, se complemente con una segunda firma electrónica llamada “Timbre”, generada por un Proveedor Autorizado de Certificación (PAC).
Comité de Factura Electrónica
En el año 1997, 45 empresas afiliadas al AMECE (hoy AMECE GS1) desarrollaron el Comité de Factura Electrónica, debido a que no existía un sistema de emisión de comprobantes fiscales digitales, puesto que estas se demostraban en documentos físicos, generalmente administrador por los contadores de las empresas.
Lo anterior llevó a la inclusión de este tipo de tecnología (e-factura) en el marco jurídico tributario y a que el SAT creara condiciones adecuadas para que los contribuyentes cumplieran con sus obligaciones tributarias.
