Ayuso presiona para que el PP acorrale a Sánchez antes del 9-J y Feijóo se niega
Máxima tensión entre Sol y Génova sobre si llevar al presidente al Senado por el caso Begoña Gómez. El líder popular teme volver a cometer un grave error al final de una campaña
- Begoña Gómez, “investigada”
- Han arremetido contra su familia
- “Isabel no se la juega el 9-J”
- No alimentar la estrategia “victimista”
- No volver a cometer un grave error
- El indulto a Puigdemont
- No debe meterse en charcos
- Sánchez y Montero están preparados
“Ayuso no se la juega en las europeas”. Es la respuesta del entorno de Alberto Núñez Feijóo al equipo de la presidenta madrileña, que presiona estos días al líder del PP para llevar al límite a Pedro Sánchez antes del 9-J, obligándole a dar explicaciones sobre los negocios de su mujer, Begoña Gómez, en la comisión de investigación del Senado.
Según ha podido saber Confidencial Digital por fuentes conocedoras de los movimientos, Ayuso presiona a Feijóo para citar a Sánchez la próxima semana tras conocerse que su esposa tenía la condición de “investigada” desde el 16 de abril.
Hay que recordar que Génova dio la pasada semana el paso definitivo para obligar a Pedro Sánchez a dar explicaciones sobre la causa abierta contra Begoña Gómez y sumó el nombre del presidente del Gobierno a la lista de casi un centenar de comparecientes llamados a la comisión por el ‘caso Koldo’, junto al de la vicepresidenta y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, y la exministra de Economía, Nadia Calviño.
Sin embargo, Alberto Nuñez Feijóo apuesta por no forzar la comparecencia del jefe del Ejecutivo antes del 9-J. Teme que el presidente salga airoso del interrogatorio, aproveche esa exposición mediática a su favor, y el movimiento se le pueda volver en contra del PP días antes de las elecciones europeas.
Los populares, que tienen mayoría absoluta en el Senado, ya han anunciado dos nuevas comparecencias la próxima semana, en plena precampaña. La del actual presidente de ADIF, Ángel Contreras, y la de la presidenta del Congreso y exmandataria balear, Francina Armengol, por considerar que “mintió” en la comisión análoga del Congreso que investiga los contratos de material sanitario durante la pandemia.
Begoña Gómez, “investigada”
En cambio, algunos miembros de la cúpula del Partido Popular son firmes partidarios de “acorralar a Sánchez” ahora en la comisión de investigación del Senado, llevarle al límite antes de las Europeas.
Las mayores presiones a Génova han llegado en las últimas horas desde el PP de Madrid, y más concretamente del equipo de Isabel Díaz Ayuso, según las fuentes del partido consultadas por ECD. Aseguran que la tensión es máxima. Le echan en cara a Núñez Feijóo el “indulto” al presidente del Gobierno por los negocios de su esposa.
La líder madrileña considera que las nuevas informaciones en torno a Gómez son “causa más que suficiente” como “para ir con todo” y forzar la comparecencia de Sánchez antes de las Europeas. Una imagen inédita de un jefe del Ejecutivo en ejercicio de su actividad.
Hay que destacar que este martes trascendió que el juez atribuyó a Begoña Gómez la “condición procesal de investigada” en el auto del 16 de abril en el que abrió diligencias, solo unos días antes de que Pedro Sánchez publicase su “carta a la ciudadanía” para reflexionar sobre su continuidad.
Han arremetido contra su familia
En el entorno de máxima confianza de la presidenta madrileña aseguran a ECD que Ayuso ha mostrado su malestar al propio Feijóo por las “reservas” con la mujer de Sánchez cuando “los socialistas han arremetido sin escrúpulos contra su padre, madre, hermano…”.
Defiende incluso citar a Begoña Gómez a declarar en el Senado porque consideran que los socialistas “empezaron primero” a involucrar a los entornos familiares en la disputa política, en referencia a que Sánchez pidió la dimisión de Ayuso por el presunto fraude fiscal de su novio, que sí está siendo investigado por los tribunales.
En el entorno de Isabel Díaz Ayuso no olvidan que recibieron hace meses información procedente de altos cargos de la Agencia Tributaria de que Moncloa estaba trabajando con un grupo de expertos, que reportaba también a la sede del PSOE en Ferraz, al que se le transmitió la orden expresa de “sacar mierda de Ayuso”.
“Isabel no se la juega el 9-J”
En cambio, en el equipo de Alberto Núñez Feijóo sostienen que tienen que prolongar los trabajos de la comisión porque aún ni siquiera conocen el volcado de los 23 móviles de Koldo García y cada día van saliendo nuevas informaciones.
La dirección del PP quiere esperar al “momento oportuno” para pulsar el botón nuclear por las dudas sobre la idoneidad de hacerlo en plena campaña electoral. “Isabel no se la juega el 9-J”, responden en Génova, en unas elecciones que el propio Feijóo ha planteado como un plebiscito sobre el Gobierno de Sánchez.
El líder del Partido Popular, de hecho, admite en privado que “tiene miedo”. No pasa por alto que el presidente del Gobierno suele “salir vivo” de este tipo de encrucijadas, y que él mismo desafió en la tribuna del Congreso a Feijóo a que le llamase tanto a él como a su esposa al Senado. “Iremos encantados”, ironizó.
No alimentar la estrategia “victimista”
Distintas voces en la cúpula del PP, tanto en el Congreso como en el Senado, han encendido las alarmas sobre la posibilidad de precipitarse en esa estrategia. “Es una operación de riesgo”, sentencian.
Génova ha medido al milímetro la campaña de las Europeas bajo el mantra de “no cometer errores” para garantizarse la victoria frente al PSOE que ahora vaticinan la mayoría de encuestas publicadas.
Por eso han evaluado con detenimiento el impacto que tendría para la campaña forzar una fotografía del presidente del Gobierno sentado en una comisión de investigación y cómo podría alimentar esta circunstancia la estrategia “victimista” del líder socialista frente a lo que él califica como “la máquina del fango” de “la derecha y la ultraderecha”.
No volver a cometer un grave error
No se olvida la tensión suscitada sobre la revalorización de las pensiones durante la entrevista que Núñez Feijóo protagonizó con Silvia Intxaurrondo en ‘La Hora de La 1’, a seis días de las elecciones generales del 23 de julio, que no tardó en trascender los estudios de la televisión pública, impregnar las redes sociales y aterrizar en los argumentarios de sus principales adversarios políticos.
Consideran que el impacto mediático habría sido más limitado en cualquier otro contexto, pero a seis días de unas generales cualquier error puede tener un efecto incierto en la opinión pública.
El indulto a Puigdemont
También recuerdan que la filtración de Feijóo sobre el indulto condicionado a Carles Puigdemont en una comida con periodistas.
El problema principal fueron de nuevo los tiempos, por haberse conocido a una semana de las elecciones gallegas del pasado 18 de febrero, en las que la batalla estaba muy reñida. Las últimas encuestas vaticinaban que el PP corría riesgo de perder la Xunta.
Unas elecciones en Galicia en las que, como en las Europeas del próximo 9 de junio, Núñez Feijóo se la jugaba, y dirigentes y barones de peso del PP no ocultaron entonces su “estupor” ante esta revelación periodística. La mayoría, además, reconocía su incapacidad para explicarla.
No debe meterse en charcos
Núñez Feijóo ha recibido el consejo ahora de que “no debe meterse ni en líos ni en charcos”. “Tiene que acostarse y no hacer ruido. Exponerse lo menos posible, porque de salida parte de una posición cómoda”, analiza uno de los asesores del cabecera del líder del PP, que le ha recomendado un final de campaña de perfil bajo.
El problema de meterse en charcos, le han sugerido, es que también puede tener el efecto contrario.
Sánchez y Montero están preparados
En cambio, fuentes del Gobierno dan por hecho que el Grupo Popular optará finalmente por llamar en plena campaña europea tanto al jefe del Ejecutivo como a la vicepresidenta primera, María Jesús Montero. Un trámite parlamentario que, según subrayan, no les preocupa.
Hace una semana, en el Pleno del Congreso, Sánchez salió en defensa de su esposa asegurando que era una profesional “honesta, seria y responsable”. “Que quiere llamar a mi esposa, será su responsabilidad, pero también irá encantada”, espetó a Feijóo.
