Juguetones e irresponsables

Cuando se proclama que con las cosas de comer no se juega, lo que quiere expresarse es que en asuntos cruciales hay que mostrarse especialmente prudentes y cuidadosos, por el daño que se puede causar, pero también para no exacerbar los ánimos del personal.

Me parecía que la expresión puede aplicarse a unas presuntas noticias, después desmentidas, sobre un inminente gran pacto municipal entre los dos principales partidos.

De acuerdo con las primeras informaciones, PP y PSOE están a punto de firmar un gran acuerdo de reforma municipal, que incluye, entre otras medidas, limitar los sueldos de los alcaldes, reducir el censo de concejales, recortar el número de instituciones locales, por ejemplo con la desaparición de un millar de mancomunidades, etc., etc.

Reconozco que, cuando leí la primicia, me llevé una alegría. Porque opino que este país necesita, en medio de tantas penalidades, que los dos grandes partidos lleguen a pactos de reforma profunda en terrenos vitales, uno de ellos la administración local. Otro más deberá ser el sistema autonómico, pero ése es asunto para otro momento.

Bueno, pues resulta de, de pacto y acuerdo municipal, nada. A lo más, unas conversaciones, que todavía están muy en el inicio.

No falta quien ha achacado a algunos de los negociadores haber lanzado una filtración todavía sin base suficiente, no se sabe si por apuntarse un tanto personal, por despistar, por hacer daño… En todo caso,por frivolidad.

Los negociadores están siendo José Enrique Serrano por el PSOE, Esteban González Pons por el PP, ypor encima, en la lado socialista, Gaspar Zarrías.

Aquel primer avance anunciando que a los alcaldes se les limitará el sueldo para que no perciban mensualmente más que el presidente del Gobierno, que es lo que ahora ocurre, mereció una magnífica acogida en la opinión pública.

El llamativo dato de que ocho alcaldes (con los de Barcelona, Madrid, Bilbao y Zaragoza en primera posición) ganan más que el presidente, y que otros siete están por delante de los secretarios de Estado,explica el visto bueno a esos presuntos recortes.

 

Bueno, pues, como digo, resulta que, de lo dicho, nada de nada. Que verdes las han segado.

Insisto en lo que decía al principio. Que no jueguen con estas cosas tan sensibles, porque el hartazgo de la gente es ya muy elevado. Concluye el último CIS que los problemas que más preocupan a los ciudadanos son, por este orden: el paro, la crisis económica, los políticos y la corrupción. Si los políticos se empeñan en volver a colocarse incluso por delante del paro y de la crisis, no sé dónde podemos llegar.

También suele hablarse de jugar con fuego. Pues que no jueguen.

PD. Me escribe a primera hora de la mañana Esteban González Pons para decir que él no tiene nada que ver con la reforma de los ayuntamientos, que es algo que llevan Zarrías y Arenas. Que se ve con José Enrique Serrano para hablar de la Ley de Trasparencia. Dejo constancia de la precisión.

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