Lo mucho empacha

Comienzan las semanas de pasión. De la pasión de los Barça- Real Madrid y de los real Madrid Barça. En un pañuelo, un partido de Liga, dos de Liga de Campeones y la final de la Copa del Rey.

Un atracón para los espectadores, para las televisiones y para los propios equipos. ¿Favorece esto a alguien? A priori no se sabe muy bien si esto es bueno para el fútbol. Habrá que ver las taquillas y los espectadores de televisión que congregan cuatro partidos tan seguidos.

Desde el punto de vista deportivo no parece que el partido de Liga en el Santiago Bernabéu vaya a disputarse con la vibración que estos enfrentamientos tienen. Los entrenadores van a jugar con las alineaciones, con las rotaciones y hasta con las tarjetas y las posibles sanciones.

La semifinal europea tiene en principio más atractivos, pero tampoco sabemos qué va a poder dar de sí. Y la final de la Copa tiene la incógnita de toda final aunque a tres días del partido del Bernabéu tampoco se pueden hacer grandes apuestas de calidad.

Se dirá que así es el calendario y que nadie más que los propios Madrid y Barcelona son los culpables –unos en negativo y los otros en positivo- de que el equipo ‘Culé’ se presente en feudo madridista con ocho puntos de ventaja y la Liga en el bolsillo.

En cuanto a Europa es un acontecimiento, sobre todo para los blancos, plantarse en las semifinales del torneo más importante.

Pero la realidad es que todos vamos a acabar un poco hartos que tanto Mourinho como Guardiola ya han enseñado todos sus ases y tienen la manga vacía y que a estas alturas no van sorprenderse entre sí. Ambos equipos van a depender de un buen día o de un mal día y el resto son especulaciones.

Especulaciones que hacen fundamentalmente las televisiones que nos han estado martirizando, con horarios disparatados, durante toda la temporada y que ahora piensan que pueden hacer un Agosto de audiencia.

Pero el atracón, se diga lo que se diga, no es bueno para nadie.

 
Comentarios